Cuando yo llegué a este mundillo, hace cosa de 10 meses, ya sabía lo que había.
Conocía el funcionamiento de los grupos, la publicidad, los blogs y sus estrategias de enlazarse, y otras cosas similares.
No me gustaban, nunca me han gustado, pero estaba dispuesta a pasar por ello, al menos por parte de ello, porque se supone que "hay que hacerlo".
Sin embargo, mi experiencia es que no es cierto.
Casi desde su publicación, mi primera novela se puso número 1 en el ránking de romántica en Amazon.com, y siguió allí durante varios meses. Todavía sigue entre las diez primeras en suspense romántico y en el top 100 de libros en español. Las demás, mal que bien, se mantienen también en distintas categorías, si no todas, la mayoría. Incluso en España se venden alguna vez, aunque aquí nunca he funcionado del todo, tal vez porque no entré en el juego de regalar libros y cumplidos a diestro y siniestro. Francamente, para mí las reseñas, si no son sinceras, no valen un pimiento.
No voy a negar que el éxito de "Olvida el pasado" fue una sorpresa para mí. ¿Fue suerte? Sin duda. Desde luego, funcionó por sí misma, porque yo no conocía a nadie, y sigo sin hacerlo, no hacía apenas publicidad, y sigo sin hacerla, y ni siquiera tenía el perfil de FB que tengo ahora. Si llegó y sigue allí es, sobre todo, por los lectores, que algo le verán.
Lo que sí es cierto es que no le debo nada a nadie, excepto a mis lectoras cero, que me ayudan en la creación de la obra, y a mis lectores, que son los que me aguantan.
Durará el tiempo que sea, tal vez mañana todo esto sea historia, pero no nos engañemos, no somos nadie, por mucho que estemos arriba en una lista y seamos bestsellers (sí, a mí me etiquetaron así). He vendido y lo sigo haciendo, más de lo que nunca hubiera esperado, teniendo en cuenta que para mí entrar en esto fue un experimento. Pero lo único que nos vamos a llevar es ser consecuentes con nuestras ideas y hacer las cosas lo mejor que podamos. Si hay algo que siempre me he considerado es precisamente, aparte de cabezota y rara de narices, consecuente.
Que no se me entienda mal. Cualquier método es bueno si te ayuda. Pero ver lo que estoy viendo en los últimos tiempos hace que me dé cuenta de que no merece la pena pasarlo mal si el peloteo y pedir favores no es lo tuyo. Y no es lo mío, francamente.
A partir de ahora me podréis encontrar, si os apetece, en mi muro y en el blog. Si me paso algún día por algún grupo, será para ver alguna de las bonitas discusiones que se ven últimamente por esos lares, donde se ensalza y se vitupera a autores con una facilidad asombrosa... si tienes la suerte de que no te ignoren.
En definitiva, bienvenidos los que se queden, adiós los que se vayan.