Por un lado, Ediciones B, vía Selección RNR, va a publicar en octubre una historia ambientada en el siglo XIX, después de las guerras napoleónicas. En ella conoceremos a Su Alteza, el príncipe Peter de Rultinia (a quien conoceremos mejor más adelante, en su propia historia) y a los hombres de su guardia. El jefe de la guardia es precisamente el protagonista de esta primera parte de la trilogía de Rultinia, sir Benedikt, un escocés que dejó su tierra de joven para ir a recalar en ese hermoso y a la vez terrible país mediterráneo, lleno de gente intrigante y peligros. En esta historia en concreto, nos lo encontramos en Inglaterra, antes de regresar a su tierra de adopción. Allí tendrá que lidiar con una mujer, Cassandra, con la que tiene una relación tan tirante que casi se podría decir que linda con el odio. Sin embargo, habrá cosas que hagan que ambos se replanteen lo que piensan y sienten por el otro.
Esta es, a mí parecer, mi mejor historia, aunque eso es algo totalmente subjetivo jajaja. Es tal vez que lo pasé muy bien escribiéndola, porque hay muchas peleas de ingenio, algo de acción, y un malo malísimo que me encanta.
La otra historia, que se publicará a saber cuándo, saldrá de la mano de Harlequín, en su colección HQÑ. En esta ocasión se trata de una historia actual, con algo de humor, bastante crítica y hasta tierna. Está ambientada en una clínica privada acosada por los problemas económicos, a la que llega un nuevo doctor, el hijo de uno de los mayores accionistas, precedido por el sambenito de ser un enchufado. Este hecho hará que el personal de su servicio no le reciba con los brazos abiertos, precisamente. Solo al conocer bien a Gabriel, sabrá Elisa que las cosas no eran como ella pensaba.
Esta historia está ambientada en el servicio de Radiología de la clínica, el departamento más romántico de cualquier hospital (jajaja, chiste privado).
Es una historia distinta, creo, donde lo principal no es la relación de los protagonistas. Tal vez es "poco romántica" en ese sentido, pero era lo que me pegaba en ese momento y forzar las cosas no me apetecía. Así que quedó como quedó.
Y, en definitiva, funcionen o no, esto es lo que hay, por si alguien siente un poco de curiosidad. Publicar no era mi objetivo en la vida, pero a veces hay que aceptar las cosas como vienen. Probaré, al menos.
Pase lo que pase, para mí nada cambia. Mis libros siguen siendo los mismos y yo también.
Nota mental: aquí el que está encantado de la vida es Alain, que dice que ha sido gracias a sus consejos y su trabajo para conseguir que me lo tome en serio que hemos llegado ahí. Yo asiento, pero es solo para darle la razón. Está tan guapo cuando sonríe...
¡¡¡¡¡Enhorabuena Arwen!!!!!
ResponderEliminarAunque tu caso es el mejor ejemplo de que no es imprescindible tener una editorial detrás para hacerse un hueco en este mundillo siempre da alegría que dos editoriales -y más dos con tanto renombre como EdicioneB y Harlequín- se interesen por el trabajo de una. Así que ya puedes estar dando saltos de alegría en el sofá, y a Alain más le vale no decir nada al respecto, que esto hay que celebrarlo como es debido ;-P
Me alegro muchísiiiimo por ti y espero poder leer pronto esas dos historias. La del hospital me llama bastante a sí que ojalá no tarden mucho en publicarla.
¡Un beso!
Gracias, Adriana!!
ResponderEliminarLa verdad es que todavía me resulta un poco raro pensar en ello jaja,pero supongo que tendré que ir acostumbrandome.
La del hospital es una historia algo distinta. Veremos cuando sale, aunque eso no depende de mí, claro.
Un saludo! !
Nos alegramos mucho por ti (aunque digas que tu intención no era publicar). La verdad sea dicha, la sinopsis de la selección RNR si nos atrae. La de HQÑ... no demasiado. Es que nos gusta todo bastante empalagoso, qué le vamos a hacer.
ResponderEliminarUn abrazo, guapa.
Vaya, y para Alain también, que sale hasta en la sopa. Jajajaja.
Jajaja gracias. Bueno, también tiene su parte empalagosa, aunque no lo voy a decir todo!!!!
ResponderEliminarCon que Alain está hasta en la sopa eh... hale ya le habéis hecho llorar...